La agricultura deberá adoptar una serie de medidas para adaptarse al cambio climático y sus consecuencias en los cultivos
Según el Informe Mundial sobre el Cambio Climático de la ONU, el cambio climático ya está reduciendo la producción de alimentos en todo el mundo. La disminución de la producción agrícola con el cambio climático puede llegar a ser del 20%. Y los países en desarrollo serán los más afectados.
Medidas para reducir las consecuencias del cambio climático en la agricultura
Estas son algunas medidas que podemos tener en
cuenta para minimizar sus consecuencias.
1. Mantente informado/a sobre el cambio climático
Es fundamental que estemos informados sobre el cambio climático y sus consecuencias para la agricultura. Conocemos las señales que nos está enviando nuestro planeta y podemos planificar acciones para adaptarnos a ellas. La agricultura no es ajena a esta realidad y por eso es tan importante estar al día.2. Toma medidas para reducir el consumo de agua
El cambio climático va a traer consigo una escasez de agua cada vez mayor. Por eso es importante que reduzcamos nuestro consumo de agua en la agricultura. Hay medidas que podemos tomar, como regar solamente cuando sea estrictamente necesario, cultivar variedades de plantas que necesitan menos agua o usar sistemas de riego eficientes.3. Adapta tus cultivos a las nuevas condiciones
El cambio climático hará que las temperaturas sean cada vez más elevadas y que haya menos lluvias. Por eso es importante que adaptemos nuestros cultivos a estas nuevas condiciones. Es crucial seleccionar las variedades de plantas más adecuadas para nuestro clima y adaptar las fechas de siembra y de cosecha.4. Evita las monoculturas (cultivo de una sola especie)
Las monoculturas son una amenaza para el futuro de la agricultura. Son un cultivo que se realiza en una sola zona y que está expuesto a grandes riesgos, como el cambio climático. Por eso es importante que practiquemos la agricultura multifactorial, es decir, que cultivemos diferentes tipos de plantas en un mismo territorio. De esta manera, estaremos menos expuestos a las amenazas que plantea el cambio climático.5. Implanta el agroecología
La agroecología es una manera de practicar la agricultura que se basa en la utilización de recursos locales. Es una forma de agricultura sostenible que nos permite adaptarnos al cambio climático. La agroecología tiene en cuenta las características de nuestro territorio y las limitaciones climáticas para cultivar las plantas adecuadas.6. Aprovecha la tecnología
La tecnología nos va a permitir vigilar el estado de nuestras parcelas de cultivo de forma remota, lo que nos dará una idea clara de cómo se están comportando nuestras cosechas en función de las condiciones meteorológicas. Además, la maquinaria agrícola moderna te ayudará con tus cultivos.7. Utilizar semillas de calidad
Las semillas son el elemento básico de cualquier plantación. Por eso, es importante que estas semillas sean de calidad y que estén adaptadas a las nuevas condiciones climáticas.8. Mejorar el manejo de las tierras
El buen manejo de las tierras también es clave para que la producción agrícola no se vea afectada por el cambio climático. Por eso, es importante que los agricultores sepamos cómo aprovechar al máximo cada centímetro de nuestra tierra.9. Aumentar la productividad
Es esencial incrementar la productividad para compensar el descenso en la producción agrícola. Mediante el uso de nuevas técnicas, la mejora de los cultivos y la innovación en los métodos de producción, se pueden conseguir mejores resultados.10. Fomentar la investigación en agricultura
La investigación en agricultura es una de las claves para hacer frente al cambio climático. Gracias a la investigación, se pueden desarrollar nuevas técnicas agrícolas y mejorar los sistemas de producción.11. Tomar medidas para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero.
Los agricultores deberán tomar medidas para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero, ya que estos son los responsables del cambio climático.Las medidas a tomar son diversas, pero la clave
para el éxito de cualquier adaptación reside en la planificación. Por ello, lo
primero que deberás hacer es analizar tu situación: ¿cuáles son tus principales
cultivos? ¿En qué zonas estás situado? ¿Qué condiciones climáticas predominan
en tu región?
A partir de aquí, podrás comenzar a tomar medidas
concretas, como la de mejorar el riego en aquellas zonas en las que la lluvia
sea escasa, o plantar cultivos resistentes a las altas temperaturas en las
regiones en las que el calor será un problema. También es importante que te
organices para reducir el impacto del calor sobre tus cultivos, por ejemplo,
instalando toldos en los invernaderos.
En definitiva, lo importante es ser proactivo y
adaptarse a los cambios que se avecinan, para lo cual es fundamental contar con
una buena planificación. Sólo de esta forma podrás minimizar las pérdidas en tu
explotación y mantenerla viable a pesar del cambio climático.
Adaptarse al cambio climático será una tarea
ardua, pero no imposible. Si los agricultores trabajamos unidos y buscamos
soluciones innovadoras, estamos seguros de que podremos afrontar los retos que
el cambio climático nos plantea.