Descubre cómo se recicla un coche, qué piezas se aprovechan, el proceso de descontaminación y los beneficios ambientales y económicos del reciclaje
El reciclaje de vehículos es una de las actividades más importantes para la economía circular y la protección ambiental. Cada año miles de coches llegan al final de su vida útil y se procesan en Centros Autorizados de Tratamiento (CAT), donde más del 95% de sus componentes se recuperan o se reutilizan. En este artículo te contamos cómo se lleva a cabo el proceso, qué piezas se aprovechan y por qué el reciclaje automovilístico beneficia tanto al planeta como al bolsillo.
Cómo se recicla un coche paso a paso
El reciclaje de un vehículo implica una cadena de procesos controlados y certificados. No se trata solo de desguazar: hay un protocolo completo de descontaminación y clasificación que garantiza seguridad y sostenibilidad.
- Recepción y baja en la DGT: el coche se entrega en un CAT y se tramita su baja definitiva.
- Descontaminación: se retiran líquidos y elementos peligrosos como aceites, refrigerantes, combustible, baterías y filtros.
- Despiece y recuperación: se desmontan las piezas que pueden reutilizarse, repararse o revenderse.
- Clasificación de materiales: se separan metales, plásticos, vidrios y componentes electrónicos.
- Compactado y reciclaje: el resto de la carrocería se prensa y se envía a plantas de fundición o reciclaje industrial.
Piezas reutilizables más comunes
Muchos recambios de vehículos pueden tener una segunda vida después del tratamiento. Su aprovechamiento reduce la necesidad de fabricar componentes nuevos, ahorrando materias primas y energía.
- Motores y cajas de cambio: reacondicionados o vendidos como recambio garantizado.
- Puertas, retrovisores y lunas: reutilizados tras revisión y pulido.
- Ruedas y neumáticos: si conservan dibujo y estructura, se montan en vehículos de segunda mano.
- Faros, pilotos y paragolpes: restaurados para el mercado de recambios.
- Asientos y tapicerías: recuperados o enviados a reciclaje textil.
- Componentes electrónicos: sensores, centralitas, alternadores o motores eléctricos reparados y reutilizados.
Materiales que se destruyen o transforman
No todo puede reutilizarse directamente, pero incluso los materiales no aprovechables se transforman de forma sostenible. Así se cierran los ciclos productivos.
- Metales: se funden y vuelven al mercado como acero o aluminio reciclado.
- Plásticos: triturados y utilizados para fabricar piezas no estructurales.
- Vidrios: reciclados para la industria del vidrio plano o botellas.
- Baterías: tratadas para recuperar plomo, ácido y plástico sin contaminar el entorno.
- Aceites y líquidos: gestionados por empresas certificadas para evitar vertidos y generar biocombustibles.
Beneficios ambientales y económicos del reciclaje
Reciclar un vehículo no solo evita la contaminación, sino que también impulsa el ahorro energético y la economía local. Estos son los beneficios más relevantes:
- Reducción de residuos: más del 95% de un coche se aprovecha total o parcialmente.
- Menor contaminación: los líquidos contaminantes se gestionan correctamente, evitando daños al suelo y al agua.
- Ahorro de energía: fabricar piezas con materiales reciclados requiere hasta un 75% menos de energía que producirlas desde cero.
- Economía circular: las piezas reacondicionadas se reintegran al mercado de segunda mano.
- Generación de empleo verde: el sector del reciclaje automovilístico crea puestos técnicos y medioambientales especializados.
El futuro del reciclaje automovilístico
Con el avance de la movilidad eléctrica y los nuevos materiales compuestos, el reciclaje de vehículos se enfrenta a un reto apasionante. Las normativas europeas apuntan a un reciclaje del 100% y a la trazabilidad total de las piezas.
Los CAT están evolucionando hacia modelos más digitales, con trazabilidad mediante etiquetas RFID y control de residuos por software. El objetivo es garantizar que cada vehículo se procese de forma transparente, segura y respetuosa con el medio ambiente.
Preguntas frecuentes sobre reciclaje de vehículos
Resolvemos las dudas más comunes sobre el proceso de reciclaje automovilístico y sus ventajas:
¿Cuánto se recicla realmente de un coche? +
Más del 95% del peso total se recupera o reutiliza: metales, plásticos, vidrios y componentes electrónicos.
¿Puedo vender piezas de mi coche antes del desguace? +
Sí, siempre que lo hagas antes de la baja definitiva y sin comprometer la seguridad del vehículo. Una vez entregado al CAT, todas las piezas pasan a gestión autorizada.
¿Qué pasa con los coches eléctricos? +
Se reciclan con protocolos específicos para baterías de litio y sistemas eléctricos. Los CAT deben estar habilitados para su tratamiento seguro.
¿Por qué es importante llevar el coche a un centro autorizado? +
Solo los CAT garantizan la gestión legal y medioambiental del vehículo, evitando multas y daños ecológicos.
¿Qué beneficios económicos tiene el reciclaje? +
El propietario puede recibir una compensación simbólica y el mercado se beneficia de piezas reacondicionadas más baratas y sostenibles.
Entrega tu coche a un CAT certificado y ayuda al planeta
Contribuye al reciclaje responsable y asegúrate de que tu vehículo se trate conforme a la ley. Solicita la recogida gratuita y recibe el certificado de destrucción que acredita su baja definitiva y su correcta gestión ambiental.


















